Esta Bitácora tuvo su inicio en los tiempos de la Gran Pandemia, cuando el orbe terrestre comenzó a experimentar la inédita aceleración de algunas de las trasformaciones más colosales que la historia de las civilizaciones haya conocido; aquellas que prometen rediseñar por completo el mundo hasta ahora designado como humano. En ese momento, quienes integramos la colección de la Biblioteca de la Filosofía Venidera y otros intelectuales, amigas y amigos que estiman que el pensamiento sólo es posible cuando se declina en plural, fuimos acogidos por el espacio artístico y cultural de Miño y Dávila Editores para llevar adelante, junto a Gerardo Miño, nuestra primera Bitácora. En aquellos días aciagos, todas las certezas tambaleaban bajo nuestros pies y, desde entonces, la situación no ha mutado en demasía salvo que ahora estamos, quizás, mejor entrenados como atletas de lo desconocido.
Nos propusimos en aquel momento darnos la tarea de cartografiar el mundo que, día tras día, se diseña ante nuestra contemplación azorada: una nueva configuración civilizacional aún carente de nombre, pero no de contundencia. Y, entretanto, dar lugar a las más diversas manifestaciones de la filosofía y las Humanidades, tanto en el plano nacional como internacional, mediante invitados que nos honran con sus escritos. Los mismos son puestos a disposición de ustedes, los amigos lectores, a título gratuito porque es el modo más genuino del diálogo filosófico y porque es, también, nuestra modesta forma de agradecerles por todo cuanto nos brindan al seguirnos en esta aventura de descubrimiento.
Quienes tengan la bondad de acompañarnos en esta nueva edición de la Bitácora se encontrarán con una problemática que afecta directamente nuestro presente y compromete nuestro futuro, esto es, la emergencia de las “ciudades inteligentes” como nueva cosmovisión totalizadora del tiempo actual escrita en clave arquitectónico-tecnológica para modelar un futuro para la Humanidad. Al correr de los artículos, se podrá constatar los esfuerzos por seguir indagando lo que sucede en este mundo en transición. No buscamos aportar hipótesis apodícticas sino, al contrario, dar contenido a nuestras dudas y allanar junto a ustedes el camino para la comprensión conjunta de los fenómenos innominados que se despliegan en nuestro derredor y abarcan, en definitiva, la suma del mundo. Se trata, por tanto, de un puntapié inicial cuya posta será, tenemos la esperanza, retomada por ustedes, nuestros lectores a quienes sabemos mejor equipados para semejante empresa. No obstante, como de algún modo hay que empezar, he aquí la invitación.
Fabián Ludueña Romandini
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